Recién finalizado el curso escolar muchos jóvenes en edad ya de decidir su futuro se plantean qué tipo de estudios realizar. Muchos piensan que la educación universitaria es la más completa o la que más puertas les abrirá al finalizar la carrera. Otros simplemente siguen la corriente pensando que estudiar una carrera da más clase, viéndolo como algo elitista. Otros estudian una carrera universitaria por verdadera vocación, porque es algo que siempre han querido hacer. Sin embargo muchos se encuentran de bruces con la realidad actual: numerosos estudios afirman que no por tener estudios universitarios encuentras antes un trabajo, y de hecho gran parte del paro juvenil procede de jóvenes que han finalizado una carrera y no consiguen encontrar un hueco en el mercado laboral.
Por otro lado se encuentran los estudiantes que, una vez analizadas las opciones que ofrecen las diferentes universidades, no encuentran ninguna carrera que les llene plenamente. En la mayoría de los casos se trata de personas motivadas, creativas, que necesitan aprender a la vez que practicar y que buscan desarrollarse como profesionales formados y competentes en una determinada área. Si es tu caso no dejes de estudiar las posibilidades que ofrecen los estudios de grado, en los que existen alternativas para todo tipo de actividades sea cual sea tu preferencia. Por ejemplo, si te gusta la fotografía y crees que tienes talento para ello puedes inscribirte en una escuela de fotografia como citm. Y es que todo sería mucho mejor si cada uno se dedicara a aquella actividad para la que está realmente dotado, y por ello es necesario un ejercicio personal de reflexión para averiguar qué se te da realmente bien, qué te gusta hacer y a qué te gustaría dedicar tu vida.
Actualmente existen estudios de grado para cualquier tipo de profesión, y cada día son más los jóvenes que optan por formarse en aquello que les llena, por ejemplo el mundo de la imagen y sonido, la publicidad, el márketing, la automoción… A través de un grado medio o superior puedes aprender teoría a la vez que práctica y entrar de lleno en el mundo que hayas elegido aprendiendo una profesión para la que acabarás perfectamente preparado pudiendo trabajar nada más finalizar tus estudios. Y es que por lo general al ofrecerse prácticas en empresas es mucho más sencillo encontrar un trabajo después de estudiar un grado que tras finalizar la universidad.